ALCORAC SALVADOR NAVARRO

                                                                                                     

                

                                                                     Circular nº  3. Año IV

                                                                     Llubí, 1º de Marzo de 1.998

 

 

Viene de la Circular de Febrero ......

Si puedes entender lo que estoy diciendo, que el ego puede ser abandonado en este momento, y si esto es verdad, entonces nace una pregunta: ¿Por qué el ego no está cayendo? ¿Por qué no consigues abandonarlo? Si no es una cuestión de crecimiento gradual, entonces ¿por qué no lo estás abandonando?  Es porque no quieres dejarlo. Y esto te choca, porque sigues pensando en dejarlo. Reconsidera esto. No quieres abandonarlo y por eso él sigue. No es cuestión de tiempo. No puedes hacer nada, porque no quieres dejarlo.

Son misteriosos los caminos de la mente. Piensas que quieres abandonarlo y, en el fondo, sabes que no lo quieres hacer. Es posible que quieras trabajarlo un poco más, que quieras refinarlo más aún, pero no quieres dejarlo realmente.

Si quisieras hacerlo, no habría nadie que te lo impidiera. Ninguna barrera existe. Sólo con quererlo puedes abandonarlo. Aún un millón de maestros intentando convencerte, no resolverá el problema, porque nada se puede hacer desde el exterior.

¿Has pensado sobre esto? ¿Has meditado sobre el particular? ¿Quieres realmente ser una nada, un no-ser?  Aún en tus proyectos religiosos, tú quieres ser algo, quieres encontrar algo, llegar a algún lugar, ser alguna cosa. Hasta cuando piensas en ser humilde, tu humildad, tu modestia, es un escondite secreto para el ego y nada más.

Mira a las personas a las que llamas humildes. Ellos dicen que lo son e intentan probar que son las más humildes del pueblo, de la ciudad, de su barrio. Y si tú dices: "No. Hay personas más humildes que vosotros". Ellos quedarán entristecidos. ¿Quién siente esa tristeza?

Hace muchos años leí una historia sobre un santo. El decía a Dios en sus oraciones: "Soy la persona más mala de la tierra, el mayor pecador". Aparentamente él era un hombre humilde, pero no era así. El decía: el mayor pecador sobre la Tierra, y si Dios no estuviese de acuerdo, era capaz de discutirlo hasta con El. El interés, el interés más profundo, está en ser el mayor, no en ser el pecador.

Tú puedes ser un pecador y, si te fuera permitido ser el mayor, conseguirías tener placer en eso. Tú necesitas ser alguien. Sea cual fuere el pretexto para eso, tu ego necesita estar en la cumbre.

Se cuenta que Bernard Shaw decía: "Es mejor ser el primero en el infierno que el segundo en el cielo". El infierno no será un lugar desagradable si allí eres el primero. Hasta el cielo parecería insípido si estuvieras en algún lugar de la fila, sin ser el primero. Así funciona la mente humana.

Nadie quiere abandonar el ego. De lo contrario no habría problema. Es posible abandonarlo en este mismo momento. Y si sientes que el tiempo es necesario, entonces el tiempo lo necesitas sólo para que tú comprendas

que estás apegado a tu ego. En el momento que comprendas que él es sólo un apego tuyo, todo puede suceder.

Es posible que te lleve muchas vidas para comprender esto hecho. Hasta ahora has pasado por muchas y aún no has comprendido. Esto parece muy extraño. Hay algo que es como un fardo, que te mantiene en el infierno, pero tú sigues apegado. Debe haber una razón profunda para eso, alguna cosa enraizada. Me gustaría decirte algo sobre esto.

El camino de la mente humana es y será siempre escoger la ocupación, en vez de la desocupación. Aunque estar ocupada sea doloroso, aunque sea un sufrimiento, la mente prefiere estar haciendo algo, porque si está vacía siente como si se estuviera disolviendo.

Los psicólogos dicen que cuando las personas se jubilan de sus ocupaciones, de sus negocios, mueren pronto. La vida de ellas se reduce en unos diez años. Antes de su muerte ya comienzan a morir, porque no están ocupados.

Cuando estás vacío comienzas a sentirte inútil, frívolo, a sentir que no eres necesario, que sin ti el mundo puede continuar con facilidad. Cuando estás ocupado te parece que el mundo no puede seguir sin ti, que eres una parte esencial de él, que sin ti algo podría detenerse.

Si estás desocupado, de repente te haces consciente de que sin ti el mundo seguirá siendo maravilloso. Nada va a cambiar. Te sientes descartado. Como un montón de basura. No eres necesario.

En el momento que sientes que no eres necesario, el ego se agita, porque él existe cuando estás ocupado en alguna cosa, y quiere seguir forzando esta actitud en todo el mundo. Tú eres como una necesidad, sin ti nada puede suceder, sin ti el mundo no tiene razón de ser.

Si no tienes nada que hacer, comprendes que el juego sigue y tú no formas parte de él. Nadie se preocupa por ti, nadie piensa en ti. Esto reduce al ego a su más mínima expresión. Es por eso que las personas buscan algo que hacer, continuar con la ilusión de que son necesarios.

La meditación es un estado de desocupación de la mente. Es un profundo retiro. No un retiro superficial como el de alojarse en un monasterio. Esto puede no ser un retiro absoluto, porque allí puedes volver a ocuparte. Podrás crear fantasías, como la de estar salvando al mundo de la tercera guerra mundial, o la de estar creando muchas vibraciones positivas y que con ellas el mundo llegará a un estado de paz social.

Sentirás placer en esa ocupación. Nadie va a discutir eso contigo, porque tú estás solo. Nadie estará para decirte que vives una ilusión. Puedes quedar completamente enredado con estas alucinaciones. El ego se afirmará nuevamente a sí mismo de un modo más sutil.

La meditación no es un retiro superficial, sino profundo, íntimo, verdadero, un abandono de la ocupación. No es que estés desocupado, puedes continuar haciendo lo que quieras hacer, pero retirarás de ti la posibilidad de una ocupación.

Entonces comenzarás a sentir que esa ansia por ser necesario es tonta, estúpida. El mundo puede continuar muy bien sin ti, pero esto no te va a deprimir, sino que será bueno. Si todo sigue bien sin ti, pues tanto mejor.

Eso se torna una liberación, si lo comprendes. Si no es así, te sentirás destrozado. Es por eso que las personas quieren mantenerse ocupadas y el ego les da la mayor ocupación posible, las 24 horas del día. Ellos están pensando en como ser miembros del Parlamento, como ser banqueros o presidentes de algo. El ego sigue y sigue dándote sueños, una constante ocupación interna y tú sientes que están pasando muchas cosas.

Dicen los psicólogos que el hombre puede vivir sin alimentarse unos 90 días como máximo, pero no puede vivir 90 días sin soñar, porque podría volverse loco. Si no pudieras soñar, en tres semanas podrías enloquecer. Sin alimentos, tres semanas no serían perjudiciales; hasta podrían ser buenas para la salud y rejuvenecería el organismo.

Los sueños deben cubrir alguna necesidad profundamente enraizada. Y esta es la necesidad: ellos te dan ocupación sin que te ocupen realmente. Puedes estar sentado, soñando, hacer lo que quieras y el mundo entero se moverá de acuerdo contigo en tus sueños. Nadie te creará problemas. Podrás matar, asesinar, cambiar lo que quisieres. Tú ahí eres como un dictador.

El ego se siente más vital cuando sueña, porque no hay antagonista, nadie que pueda decirle que está equivocado. El es total, único. Puedes crear lo que quieras, eres totalmente poderoso, omnipotente, en tus sueños.

Pero lo sueños acaban cuando cae el ego. Esta es la verdadera señal. En las antiguas escrituras esta era la señal de que un hombre se iluminaba cuando dejaba de soñar, porque el sueño termina cuando ya no es necesario. Era una necesidad del ego.

Tú quieres estar ocupado. Por eso no puedes abandonar el ego. A menos que estés preparado para quedar vacío, a menos que estés preparado para ser nadie, a menos que estés preparado para gozar de la vida.

Tú tienes necesidad de ser necesario, de que alguien te necesite, y entonces te sientes bien. Si las personas te necesitan cada vez más, te sentirás mucho mejor. Es por eso que la posición de líder es tan apreciada y por qué muchas personas lo necesitan.

Un líder puede ser muy humilde. No tiene necesidad de afirmar su ego. El puede ser la vida para muchas personas, pero puede permitirse ser humilde.

Recordemos este hecho: las personas que afirman su ego son siempre las que no consiguen influenciar a los otros.  Entonces se vuelven afirmativas, aseguradoras, porque este es el único medio de decir que es alguien. Si ellas pudiesen influenciar a las personas, persuadirlas, nunca convincentes, serían humildes, aparentemente por lo menos. No parecerían egoístas, porque de un modo sutil muchas personas dependerían de ellos.

Si el ego es tu expresión y tu significado, ¿cómo puedes abandonarlo? Leyéndome puedes pensar en abandonarlo, pero sólo por el pensamiento no puedes. Tienes que comprender las raíces, dónde están, por qué existen.

Ellas son las fuerzas inconscientes que trabajan en tu interior sin tu conocimiento. Ellas tienen que volverse conscientes. Tienes que traer todas las raíces de tu ego hacia fuera, para poder mirarlas y ver.

Si puedes estar desocupado y satisfecho sin ser necesario, el ego puede  caer en este exacto momento. La meditación te prepara para ello. Puede pasar en un momento, pero la comprensión llevará más tiempo.

Es exactamente cómo cuando calientas agua. Ella queda cada vez más caliente; pero, en un determinado grado, cien grados, ella comienza a evaporarse. La evaporación ocurre en un único momento. No es gradual, ni repentina.. Del agua al  vapor hay un salto. La evaporación ocurre en un momento, pero el calentamiento lleva un tiempo.

La comprensión es así como el calentamiento. Lleva tiempo. La caída del ego es como la evaporación. Llega de repente.

Por tanto no intentes abandonar el ego. Por el contrario, profundiza en su entendimiento. No intentes hacer que el agua se transforme en vapor. Caliéntala. La segunda llegará automáticamente.

Crece en entendimiento. Sé más intenso. Llénate de energía para comprender el fenómeno de tu ser, de tu ego, de tu mente, de tu consciencia. Sé cada vez más alerta. Y sea lo que ocurra, haz de todo esto un punto a ser comprendido también.

Alguien te molesta y tú sientes rabia. No pierdas esa oportunidad e intenta comprender el porqué de esa rabia. No hagas de eso algo filosófico. No vayas a los libros a estudiar sobre la rabia. La rabia está sucediendo dentro de ti y ella es una experiencia viva. Pon toda tu atención en eso e intenta comprender  por qué está pasando eso en ti. No es un problema filosófico. Ningún Freud debe ser consultado sobre el tema. No hay necesidad. Es tontería consultar con alguien cuando la rabia te está sucediendo. Puedes tocarla, experimentarla, estás quemándote con ella.

Intenta entender por qué está pasando, de dónde viene, dónde están las raíces, como ha llegado, como funciona, como se apodera de ti, como te vuelve loco. La rabia vino en el pasado y está presente ahora, pero en este momento un nuevo elemento ha sido sumado a ella: el elemento de la comprensión. Y la cualidad va a cambiar. La comprensión es como el calentamiento, que cuando llega a un determinado punto el agua desaparece.

El sexo es algo que está presente, intenta comprenderlo. Cuanto más comprensión, menos sexualidad. Y llegará un momento en que la comprensión será perfecta y el sexo desaparecerá.

Y este es mi criterio. Cualquiera que sea el fenómeno de energía interna, si ella desaparece por la comprensión, es pecado; si por la comprensión profundizamos en ella, entonces es virtud. Cuanto más comprendas, más desaparecerán las mentiras y la verdad tomará raíces. El sexo desaparecerá y el amor profundizará. La avaricia desaparecerá  y la comunión tomará profundidad. El odio desaparecerá y la compasión será profunda. Por tanto, todo lo que desaparece por la comprensión está equivocado; todo lo que toma raíces es verdadero. Es así como defino lo bueno de lo superior, virtud o pecado. Un hombre santo es un hombre comprensivo, sólo eso. Un pecador es un hombre sin ninguna comprensión, sólo eso. Ente un santo y un pecador la distinción no es de pecado o de santidad, sino de comprensión.

La comprensión funciona como un proceso de calentamiento, hasta el punto de ebullición. De repente, el ego cae. Es imposible hacerlo caer directamente. Pero es posible preparar la situación para que caiga. Y esto lleva tiempo.

Siempre han habido dos escuelas. Una escuela es la de la iluminación repentina, la cual dice que la iluminación llega de repente, que no está en el tiempo. La otra escuela, contradice a la primera, es la de la iluminación gradual; ella dice que ella viene gradualmente, nunca de repente. Y ambas están en lo cierto, porque las dos escogieron una parte del fenómeno.

La escuela gradual escogió la primera parte, la parte de la comprensión. Ella dice que tiene que suceder a través del tiempo. Y están en lo cierto. Ellas dicen que no es preciso preocuparse con lo repentino. Basta seguir el proceso y si el agua fuera calentada correctamente, se evaporará. No es preciso ocuparse con la evaporación. Olvídate completamente de ella. Simplemente calienta el agua.

La otra escuela, totalmente opuesta, dice que la iluminación es repentina; ella tomó la parte final. Dice que la primera fase no es muy esencial; lo que importa es que esa explosión suceda en un intervalo intemporal. La primera fase es la periferia. La verdadera, la segunda fase, es el centro.

Pero yo te digo que ambas están en lo cierto. La iluminación llega de repente. Siempre llega de repente. Pero la comprensión lleva tiempo.

Ambas están en la verdad y ambas se pueden interpretar erróneamente.Tú puedes hacer trucos contigo mismo. Puedes engañarte a ti mismo.Si no quieres hacer nada, es bonito creer en la iluminación repentina. Entonces dirás: "no hay necesidad de hacer nada. Si ella viene de repente, ¿qué puedo yo hacer?" Sólo esperar. Esto puede ser una auto-trampa.

A causa de esa actitud, algunas religiones han desaparecido. Hay tradiciones de iluminaciones repentinas. Mucha gente ha creído y cree que una iluminación súbita es la única posibilidad. Y como no se puede hacer nada, entonces ¿por qué preocuparse?

En Oriente ha ocurrido otro fenómeno. Y es por eso que yo continúo diciendo siempre que la mente humana es muy astuta. Hemos de estar constantemente alerta, de lo contrario, estarás siempre esquivando la verdad.

Está la iluminación gradual. Este es el significado de los "yogas". Tienes que trabajar por la iluminación durante muchas vidas. La disciplina se hace necesaria, el trabajo también y, a menos que se trabaje duramente, no se alcanzará la iluminación.

Por tanto, este es un largo proceso, tan largo que los orientales dicen que toda una vida  no es suficiente. Pero entonces en Oriente se pasó a creer que si era un largo proceso no había prisa. ¿Para qué las prisas? Hay que gozar del mundo, hay tiempo suficiente. Es un proceso tan largo que no puedes acabarlo hoy. Y si esto fuera posible, entonces se pierde el interés. Nadie está tan interesado y podemos esperar muchas vidas. Así, las personas olvidaron esto.

El concepto gradual destruyó la religión en Oriente, el concepto repentino lo hizo con algunas en Occidente. Para mi, ambas son verdaderos, porque son la mitad de un proceso total. Y hay que estar muy despierto para no desinteresarse del mismo.

Esto parece contradictorio, pero me gustaría decirte: puede pasar en este mismo momento, pero este momento puede aplazarse muchas vidas para llegar. Puede pasar en este exacto momento, pero hay que esperar muchas vidas para que llegue.

Por tanto, trabaja duro, como si pudiera  pasar en este momento. Y espera pacientemente, porque es impredecible. Nadie puede decir cuando sucederá. Espera pacientemente. Como si el proceso fuese un largo y gradual desarrollo. Y trabaja duro, con todo el ardor que te sea posible, como si estuviera por pasar aquí y ahora.

 

 

                                       AUTOCONSCIENCIA

          Una característica exclusivamente humana es nuestra habilidad de observarnos a nosotros mismos, nuestros pensamientos y sentimientos, de apartarnos mentalmente de las situaciones inmediatas y evaluarlas. En otros palabras, somos autoconscientes. Esta capacidad conduce a otras habilidades singularmente humanas. Aumentó enormemente nuestro poder de escoger, basado en el planeamiento y en la previsión de futuro. La elección conduce a un grado de responsabilidades totalmente nuevo para con nuestras acciones. La autoconsciencia también está subyacente en el lenguaje y en el uso de los símbolos, en las matemáticas, música y pensamiento abstracto.

De acuerdo con las Escuelas de Misterios, este salto dramático, aún no completamente efectivo, no fue heredado de los predecesores del hombre en su evolución. Al revés de esto, introdujo una nueva dimensión en ella, implantada en el organismo humano a partir de una fuente espiritual. Decía un maestro espiritualista:

          "..... parece existir una laguna intelectualmente intraspasable entre la evolución de la vida y el hombre como tal. El hombre es aún un animal por su propia estructura ..... no obstante, él también trajo al mundo, de una fuente desconocida, otros instintos e ideas específicamente humanos que se hicieron extraordinariamente importantes ..... "

El despertar de la mente del hombre resultó de una fusión de la Mente Divina en la Naturaleza. Aunque la Inteligencia Divina esté difundida a través de toda la Naturaleza, en la mente del hombre existe un foco más directo, una conexión nueva, más íntima, con el mundo físico. El hombre es portador de la Mente Divina de una manera no encontrada en otros reinos. Ella funciona más plenamente dentro de su consciencia y ser interior.

El impacto pleno de esta nueva dimensión reside muy distante en el futuro: el potencial interior de nuestras mentes está aún apenas parcialmente desarrollado. Creo que la evolución de nuestras potencialidades está lejos de estar agotados. El hombre tendrá que desarrollarse como portador de un espíritu de proyección cósmica.

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I N T E R E S A N T E

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