ALCORAC

SALVADOR NAVARRO 

 

 

                                                                          

Dirigida a las Escuelas de:

                        Barcelona

                        Mallorca                                             CIRCULAR nº 4 - Año III

                        Menorca

                        Las Palmas                                          Llubí,  1º de Abril de 1.997

Viene de la Circular de Marzo de 1.997.

La siguiente técnica: " Cuando estés en actividad cotidiana, mantén la atención entre las dos respiraciones y, haciendo así, en pocos días nacerás transformado".

"Cuando estés en la actividad diaria, debes estar atento en el intervalo entre las dos respiraciones .... " Olvida las respiraciones. Queda atento a los intervalos. El aire entró: antes de salir, antes de ser exhalado, hay una pausa. El aire sale: antes de ser retomado, hay un intervalo."En la actividad diaria, hay que estar atento entre las dos respiraciones y, de esta manera, en pocos días nace una transformación". Pero esto debe ser hecho continuamente. Esta técnica ha de ser practicada cada día, cada hora, cada minuto. Por esto se dice: "En la actividad diaria ...."  Lo que quiera estés haciendo, mantén la atención en el espacio entre las dos respiraciones. Pero debe ser practicado cuando se está en actividad.

Hay técnicas muy semejante. Existe una diferencia: que es la de ser practicada durante la actividad común. No practicarla en ciertos momentos. Esta práctica debe ser hecha mientras hacemos cualquier cosa. Estamos comiendo: continuemos comiendo pero estemos atento al intervalo. Estamos andando: continuemos andando y estemos atentos al intervalo. Vamos a dormir: acostémonos, dejemos que venga el sueño. Pero continuemos atentos al intervalo.

¿Por qué en actividad? Porque la acción distrae la mente. La actividad está siempre llamando nuestra atención. No quedemos distraídos. Concentrémonos en la pausa. Y no paremos nuestra actividad: dejemos que ella continúe. Tendremos dos planos de existencia: el mundo del hacer y el mundo del ser. La circunferencia y el centro. Continuemos trabajando en la periferia, en la circunferencia; no nos detengamos. Pero sigamos trabajando atentamente también en el centro. ¿Qué pasará? Nuestra actividad se tornará una representación, como si estuviésemos desempeñando un papel en una comedia.

Estamos representando un papel, por ejemplo: en una pieza de teatro. Actuando somos Hamlet, Don Juan. Seguimos representando a uno o a otro, pero, entretanto, seguimos siendo el mismo. En el centro, nosotros sabemos quienes somos, en la superficie representamos al personaje del papel. Sabemos que no somos el personaje, sino que lo representamos. La atención está centrada en nosotros mismos; la actividad sigue en la circunferencia.

Si este método fuera practicado, la vida entera será una larga representación. Seremos actores representando papeles, pero constantemente centrados en la pausa. Si olvidamos la pausa, olvidaremos nuestra representación; nos transformaremos en el papel. Ya no será una representación. La confundiremos con la vida. Eso es lo que hemos hecho. Todo el mundo piensa que estamos viviendo nuestra vida. No es vida: es sólamente un papel, una parte que nos ha sido dada por la sociedad, por las circunstancias, por la cultura, por la tradición, por la situación, por el país. Estamos representando e identificados con el papel. Para romper esa identificación, emplearemos esta técnica.

Dios tiene muchos nombres. Parece uno de los actores más grandes. Está constantemente centrado en sí mismo y representando muchas piezas de teatro, muchos juegos, pero nunca seriamente. La seriedad viene con la identificación. Si realmente nos transformamos en el Don Juan o el Hamlet de la pieza teatral, acabaremos teniendo problemas. Y esos problemas vendrán a partir de nuestra seriedad. Si Doña Inés nos despreciara tendríamos un ataque cardíaco y la escena tendría que ser interrumpida.

Nosotros somos actores. Si Doña Inés nos abandona, nadie nos deja. Volveremos a casa y dormiremos sosegadamente. Ni en sueños sentiremos que alguien nos ha rechazado.

Este es el punto a recordar: que para Dios, la vida real es sólo un papel. Hemos visto a algunos actores representando al Creador, pero es el propio Dios quien representa un papel, aunque en un escenario mucho mayor.

Si pudiéramos entender esto, entonces podríamos entender la teoría del destino. Él tiene un significado muy profundo. Y el significado es que, si consideramos que todo está determinado para nosotros, la vida se transforma en un teatro. Si estamos representando la parte de Don Juan en la pieza, no podemos cambiarla. Todo está determinado, hasta el diálogo. Si decimos alguna cosa a Doña Inés, estamos repitiendo algo que ya estaba establecido. No podríamos cambiar la vida, si la tomamos como algo determinado de antemano.

Por ejemplo: vamos a morir a una edad determinada: esto está establecido cientificamente. Y al morir estaremos desesperados, temblando de miedo, pero eso está determinado. Y tales y cuales personas estará rodeándonos: está determinado. Si todo estuviese predestinado, eso significaría que tenemos sólamente que representarlo en el escenario del mundo. Nadie nos pide que viva, sino que representemos al personaje.

Esta técnica es justamente para hacer que la vida no sea una pieza de teatro. Quedamos centrados en el intervalo entre dos respiraciones y la vida aconteciendo en la superficie. Si la atención está en el centro, entonces no estaremos fuera; esa es como una sub-atención. Podemos sentirla, conocerla, pero no significa nada. Es como si no tuviese mucho que ver con nosotros. Repito esto: si practicamos esta técnica, toda la vida será como si no estuviese marcando nada en nosotros, como si todo fuese con otra persona diferente.

La técnica siguiente: "Con la respiración intangible en el centro de la frente, cuando alcance ésta al corazón en el momento del sueño, asume la dirección de los sueños y de la propia muerte".

Cada vez entramos en planos más profundos. "Con la respiracion intangible en el centro de la frente": si ya hemos practicado con el tercer ojo, entonces conocemos la respiración intangible, el prana invisible en el centro de la frente, y conoceremos el derramar que la energía, la luz, alcanza y llena el corazón : cuando el derramar alcanza el corazón "en el momento del sueño, asume la dirección de los sueños y de la propia muerte".

Vamos a dividir esta técnica en tres partes. Primera, debemos ser capaces de sentir el prana en la respiración, la parte intangible de ella, la parte inmaterial. Sucede si estamos atentos al punto entre las dos cejas. Entonces viene fácilmente. Si estamos atentos al intervalo, entonces ella también viene, pero con menos facilidad. Si estamos conscientes del centro de nuestro ombligo, donde llega la respiración, toca y después sale, él también llega, pero aún con menos facilidad. El momento más sencillo para conocer la parte invisible de la respiración es cuando se está centrado en el tercero ojo. Pero, donde quiera que estamos centrados, él viene y comenzamos a sentir el prana fluyendo hacia dentro.

Si podemos sentir el prana fluyendo en nosotros, podemos saber cuando vamos a morir. Seis meses antes del día de nuestra muerte lo comenzaremos a saber. ¿Por qué tantos santos han predecido la fecha de su muerte? Es fácil, porque si podemos ver el contenido de nuestra respiración, el prana fluyendo dentro de nosotros, en el momento en que el proceso se invierte, también podemos sentirlo: el prana comienza a salir de nosotros. Entonces el aire no lo estamos trayendo hacia dentro. O mejor, por el contrario, el aire nos está llevando hacia fuera, el mismo aire que respiramos.

Nosotros no podemos sentirlo porque no conocemos la parte invisible, sólo la parte visible; conocemos el vehículo. Ahora la respiración está llevando el prana para dentro. Y el vehículo regresa vacío. Después, nuevamente es tomado con el prana y entra con la respiración. Así, la respiración y la expiración no son la misma cosa, recordemos esto. La respiración y la expiración son considerados vehículos, pero la inspiración entra llena de prana y la expiración sale vacía.

Lo inverso sucede cuando la muerte está próxima. La inspiración queda sin prana, vacía. Porque nuestro cuerpo no puede absorber el prana del cosmos, vamos a morir. El proceso es invertido. Y, cuando expiramos, ella lleva el prana hacia fuera. La persona que es capaz de ver lo invisible puede saber inmediatamente el día de su muerte. Seis meses antes, el proceso se invierte.

Esto es muy significativo: "Con la respiración intangible en el centro de la frente, cuando ésta alcance el corazón en el momento del sueño, asume la dirección de los sueños y de la propia muerte". Esta técnica tiene que ser practicada cuando estuviéramos a punto de llegar al sueño, en esa hora y no en otra cualquiera. Ese es el momento clave para prácticar esta técnica. Antes de que llegue el momento del sueño, nos hacemos conscientes de la respiración y de la parte invisible del prano y sentiremos como llega al corazón.

Continuemos sabiendo que está llegando al corazón. El prana entra en el cuerpo a partir del corazón. Continuemos sintiéndolo y dejemos que el sueño venga mientras estamos sintiendo continuamente. Dejemos que el sueño llegue y entramos en él.

Si esto ocurre, si estamos sintiendo la respiración invisible llegando al corazón y el sueño nos envuelve, estaremos conscientes en los sueños. Sabremos que estamos soñando. De una manera común no sabemos que estamos soñando. Cuando soñamos, pensamos que el sueño es real. Eso también ocurre a causa del tercer ojo. ¿Hemos visto a alguien durmiendo? Sus ojos están girados hacia arriba y quedan focalizados en el tercer ojo.

A causa de este enfoque en el tercer ojo, tomamos los sueños por realidades. Ellos parecen reales. Lo sabemos al despertar. Entonces sabremos que estábamos durmiendo. Pero no podemos comprender, durante el sueño, que estamos soñando. Si lo comprendemos, entonces existirán dos planos: el sueño estará presente, pero nosotros estaremos despiertos, conscientes. Para quien está consciente durante el sueño, esto es maravilloso. Dice el secreto: "Asume la dirección de tus sueños y de tu propia muerte".

Si somos conscientes de los sueños, podemos hacer dos cosas. Podemos crear sueños, en primer lugar. Normalmente no podemos crear sueños. Si queremos soñar con alguna cosa en particular, eso no está en nuestras manos. Somos una víctima de los sueños, no los podemos crear. No podemos interrumpirlos ni crearlos.

Pero si dormimos recordando que el corazón está siendo tomado por el prana, continuamente tocado por el prana en cada respiración, seremos señores de nuestros sueños y ese es un raro dominio. Entonces podemos tener los sueños que queramos. Sólo registremos cuando estuviéramos a punto de dormir: "Quiero soñar este sueño" y él se realizará para nosotros. Digamos: "Cuando duerma no quiero soñar este tipo de sueño" y ese sueño no vendrá a nuestra mente.

Pero, ¿cuál es la utilidad de ser el señor de los sueños? ¿No es inútil? No, no es una pérdida de tiempo. Cuando seamos el señor de los sueños, no soñaremos más. Es absurdo. Cuando seamos el señor de nuestros sueños, ellos desaparecerán, no tendremos necesidad de ellos. Es cuando los sueños se detienen y el sueño tiene una cualidad totalmente diferente y la cualidad es la misma de la muerte.

La muerte es un sueño profundo. Si nuestro sueño puede ser tan profundo como la muerte, eso significaría que no habrán más sueños. Los sueños crean superficialidad en el sueño. Quedamos en la superficie a causa de los sueños. Por apegarnos a los sueños es por lo que quedamos en la superficie. Cuando no hayan más sueños, simplemente caemos en el mar; nuestra profundidad es alcanzada.

La muerte es la misma cosa. Por eso en la Escuelas Secretas se dice siempre que el sueño es una muerte de corta duración y la muerte en un largo sueño. Cualitativamente ellos son iguales. El sueño es una muerte cotidiana. La muerte es un fenómeno de vida a vida, un sueño de vida a vida. Todos los días quedamos cansados: dormimos y por la mañana recuperamos la vitalidad. Renacemos. Después de una vida de 7O/80 años estamos completamente cansados. Ahora esas muertes de poca duración no serán suficientes. Necesitamos de una gran muerte. Después de esa gran muerte o gran sueño, renacemos en cuerpo completamente nuevo.

Cuando conocemos el sueño sin sueños y quedamos completamente conscientes en él, entonces no habrá más miedo a la muerte. Nadie jamás ha muerto, nadie puede morir: esa es la única imposibilidad. La muerte es imposible. ¿Por qué digo esto? Porque el universo es vida. Renacemos una y otra vez, pero el sueño es tan profundo que olvidamos nuestra vieja identidad. La mente queda limpia de cualquier memoria.

Pensemos en eso de esta manera. Hoy iremos a dormir: es exactamente como si hubiese algún mecanismo semejante al que borra las cintas grabadas, con el cual se pudiese limpiar lo que quiera se haya grabado, de tal forma que la grabación desaparece. La misma cosa es posible con la memoria, porque ella es en verdad una profunda grabación. Más tarde o más temprano encontraremos un mecanismo que pueda ser colocado en la cabeza y pueda limpiar completamente la mente. Por la mañana no seremos más la misma persona, porque no seremos capaces de recordar quién fue el que durmió. Y entonces el sueño se parecerá a la muerte. Habrá una discontinuidad. No seremos capaces de recordar quien fue el que durmió. Eso está ocurriendo naturalmente. Cuando morimos y renacemos no podemos recordar quien murió. Comenzamos de nuevo.

Con esta técnica los sueños serán voluntarios. Ya no seremos una víctima de ellos. Entonces sabremos que la muerte es un sueño útil y bello porque nos da una nueva vida, nos da todo de nuevo. La muerte deja de existir.

Hay otro significado para adquirir poder sobre la muerte: si podemos sentir que la muerte en sólo un sueño, seremos capaces de gobernarla. Si podemos gobernar nuestros sueños, podremos hacerlo también con la muerte. Podemos escoger donde nacer otra vez, de quien, cuando y en qué forma; seremos señores de nuestro nacimiento.

Concluirá en la Circular de Mayo de 1.997

                                        IMAGEN DE UN PADRE

        Existe un hombre que se esmera en el cumplimiento del deber para dar buen ejemplo;

          que es humilde, cuando podría engrandecerse;

          que llora en silencio, para no ser observado;

          que, con el corazón herido, se embrutece para imponerse como juez severo;

          que, en su ausencia, nos utiliza con el temor para evitar una acción menos correcta;

          que, casi siempre, es llamado de anticuado;

          que, fisicamente pasa el día ausente, trabajando para nuestro futuro;

          que, al fin de la jornada, regresa a casa para tomar un poco de cariño y, a veces, recibe muy poco;

          que está siempre preparado para dar una frase orientadora o relatar un ejemplo bienhechor que pueda ser imitado;

          que, muchas veces, pasa noches sin dormir para transmitir enseñanzas sin las naturales dificultades;

          que, aunque llegue extenuado, aún tiene energías para dar confianza;

          que es tan sensible que, por eso, normalmente, siente la ausencia de afecto que le es dado raramente y de forma poco comunicativa;

          que vibra, se emociona y se enorgullece por el afecto de aquellos que tanto ama.

          Ese hombre, generalmente, se agiganta y pasa a ser de un valor incalculable cuando deja de existir para siempre.

          Nunca pierdas, pues, la oportunidad de dar cariño y amistad a aquél que es tu mejor amigo:

          TU PADRE.

                                        EL HOMBRE ES INFINITO

          Caso de quedar enfermo, emplea tu mente para sanarte, sea lo que quiera tengas. Aplica con fe la Ley. Recurre a tu PADRE INTERNO, el cual es al mismo tiempo, el GRAN MÉDICO. Deja que EL, tu SOL interior, refleje sus rayos curativos sobre todo tu cuerpo y, especialmente, sobre la parte o partes afectadas.

          Deja que TU SOL INTERNO irradie de SI la LUZ VIVIFICANTE, que todo renueva y cura y tu cuerpo se fortalece con Sus Sagradas Energías.

          La ENERGIA VIVIFICANTE Y VITALIZANTE de esa Misteriosa Fuente Interna nunca te fallará ni se agotará.

          Incorpora a tus pensamientos esta afirmación:

          ¡Mi DIOS! TÚ eres en mi el SOL de la EXISTENCIA, la FUENTE INAGOTABLE de todos los BIENES, y me llenas de SALUD y transformas mi vivir en una eterna y florida PRIMAVERA.

PENSAMIENTOS

Recuerda que los agresores son enfermos. No permitas que los desiquilibrados destruyan tu trabajo o te apaguen la esperanza.

Si quieres estar sano corrige tus hábitos.

Los mejores médicos, son: conciencia tranquila, reposo y alegría.

El fluir, el nacer y la vitalidad creadora de la vida siempre son puras y simples. Nosotros somos quienes lo complicamos todo.

Sólo da valor a la salud quien estuvo enfermo.

                   

 

 

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